Un centenar de clientes de Thomas Cook alojados en hoteles de Málaga regresarán en otras aerolíneas

La quiebra del turoperador británico Thomas Cook no parece que vaya a tener una especial incidencia en la Costa del Sol. Actualmente sólo hay una decena de hoteles de la provincia con clientes alojados que tienen garantizados sus vuelos de regreso a bordo de otras compañías aéreas.

En concreto, hay unos 120 clientes de Thomas Cook procedentes de Alemania, Holanda, Bélgica e Inglaterra alojados en distintos hoteles de Torremolinos de la cadena MS Hoteles, pero con sus vuelos de regreso garantizados en otras compañías.

Así lo han indicado desde la empresa pública Turismo Costa del Sol en un comunicado, añadiendo que hace dos años que este operador turístico no tiene un vuelo directo a la Costa del Sol. De hecho, Thomas Cook «no deja viajeros ni vuelos cancelados en el aeropuerto de Málaga durante esta semana», según los datos facilitados por Aena.

En la Costa del Sol, han añadido, este mayorista de viajes «tiene una escasa incidencia. Nada que ver con el impacto que la caída de este operador tiene en las islas Canarias y Baleares, que concentran la actividad del mismo en España». Así, de las más de 850.000 plazas que el operador preveía operar entre el pasado mes de mayo y diciembre en España, más de 650.000 están concentrados en estas islas.

De las 395.000 plazas previstas hacia España entre septiembre y diciembre no hay, según un informe de Turismo Costa del Sol, ninguna que opere al aeropuerto de Málaga.

También se han mantenido contactos con el director de la Oficina Española de Turismo de Londres, con la Asociación de Empresarios Hoteleros de la Costa del Sol, con ABTA (Asociación de Agentes de Viajes Británicos), quienes han confirmado su preocupación aunque insisten en que no parece que el problema vaya a tener especial incidencia en el destino.

Precisamente, el presidente de Turismo Costa del Sol, Francisco Salado, ha informado de la creación este mismo lunes de un grupo de trabajo para estudiar los posibles efectos que la quiebra Thomas Cook pueda tener para el destino, del mismo modo que se ha puesto en contacto con el Consulado de Reino Unido en Málaga para colaborar con posibles afectados en la provincia. Este punto será abordado en una reunión de la Comisión Permanente y del Foro de Turismo prevista para este lunes.

En este grupo de trabajo se estará muy atento a los acontecimientos. No obstante, ha precisado Salado, «todos los turistas están cubiertos por la normativa de viaje y su repatriación está asegurada».

El presidente de la empresa pública de turismo ha manifestado que se trata de una «mala noticia, preocupante para el turismo en general al ser uno de los grandes turoperadores mundiales» y más para el mercado británico, ya que se suma la incertidumbre por el ‘brexit’. «No es una noticia buena para el turismo», ha apostillado.

Pese a ello, ha resaltado que la Costa del Sol no sea de los destinos más afectados por el cese de las operaciones del operador turístico: «Creo que es porque estamos haciendo bien los deberes, porque hemos trabajado para no depender tanto de los turoperadores y para diversificar mucho más entre empresas que traen visitantes y por ir también directamente al turista a su casa, para que contraten a través de Internet».

La caída de Thomas Cook, a juicio de Salado, «va a afectar» a la Costa del Sol «pero no es tan preocupante como parecía al principio». Ha subrayado que, además, está en contacto con la cónsul británica «para que nos dé datos fiables sobre personas afectadas en la provincia», para lo que ya se ha creado este grupo de trabajo para conocer los detalles «y ofrecer la total colaboración» de la empresa pública de turismo de la provincia de Málaga.