El administrador concursal de Thomas Cook entregó el pasado 31 de enero la carta de despido a los empleados de este touroperador británico, que se declaró en quiebra en septiembre de 2019, tras haber sido el segundo mayor grupo turístico a nivel mundial.

Según informó un portavoz de los trabajadores en Palma, tras la firma de esta misiva,  los empleados podrán cobrar el finiquito y solicitar el paro a partir de la primera semana de febrero.

Las cartas de despido se han entregado a los 675 trabajadores de Destination Incoming, compañía de Thomas Cook con sede en Palma y que también cuenta con personal en Canarias y la península. Los empleados firmaron en diciembre el acuerdo para el Expediente de Regulación de Empleo (ERE) derivado de la quiebra del touroperador.

A partir de ahora, solo quedan una docena de personas de retén en la compañía, tras un proceso que se ha prolongado varios meses. Tras la quiebra del operador, millares de turistas quedaron atrapados en sus destinos y tuvieron que ser repatriados en lo que fue la mayor operación de estas características de las Segunda Guerra Mundial.

En concreto, el touroperador británico quebró el pasado 23 de septiembre. Tras esto, el Gobierno de España aprobó un paquete de medidas urgentes, por más de 700 millones de euros destinado a paliar los efectos de insolvencia del grupo empresarial, así como al fortalecimiento y mejora de la competitividad del sector turístico.

Por su parte, el Govern balear también aprobó una serie de actuaciones de ámbito autonómico, con ayudas para los trabajadores en situación de concurso y medidas para dotar de liquidez a las empresas afectadas por impagos, entre otras.