El sector hotelero afronta esta crisis en mejores condiciones que en 2008, según un informe

El sector hotelero europeo afronta esta crisis en mejores condiciones que en 2008, con menores niveles de apalancamiento, lo que puede permitir afrontar la situación con mayores garantías, según un informe de Cushman & Wakefield que describe el impacto radical que la crisis sanitaria está teniendo en el mercado hotelero europeo en 2020.

El informe ‘Impacto del COVID-19 en el mercado inmobiliario EMEA’ indica que aunque la mayoría de los hoteles en Europa están sufriendo las consecuencias del coronavirus al estar cerrados los inversores están todavía en búsqueda de oportunidades, especialmente relacionadas con activos hoteleros en dificultades.

Según su análisis «a pesar del cierre, algunas transacciones y negociaciones de alquiler continúan en toda Europa y hay una serie de inversores ágiles con liquidez que buscan aprovechar las oportunidades que surgirán en los próximos meses para recapitalizar inversiones estresadas y adquirir activos potencialmente en dificultades».

En este sentido, Cushman & Wakefield entrevistó a 49 inversores hoteleros de EMEA a mediados de marzo de 2020, y el 41% aseguró que todavía están buscando oportunidades de negocio.

BUEN COMIENZO DE AÑO

Durante los primeros dos meses del año, los indicadores de los hoteles europeos mostraron un crecimiento positivo de los ingresos por habitación disponible (RevPAR), debido al aumento de la tarifa diaria promedio (ADR) y a pesar de un muy ligero descenso en la ocupación.

Después de este comienzo de año relativamente bueno, Europa se ha visto afectada por la crisis del Covid-19, viendo caer rápidamente los niveles de ocupación a partir de la primera mitad de marzo.

Si bien inicialmente, algunos mercados se vieron menos afectados que otros (como el Reino Unido), la mayoría de los hoteles ahora están cerrados en toda Europa, a excepción de algunas ubicaciones cercanas a aeropuertos.

Algunos hoteles en Europa se están convirtiendo en hospitales, instalaciones de cuarentena, refugios, espacios logísticos temporales o incluso sirven como lugares de trabajo temporales con habitaciones que se ofrecen como oficinas privadas para aquellos que luchan para trabajar desde casa. Además, los restaurantes de los hoteles se están utilizando para elaborar comida para llevar.

El informe indica que todos los agentes del mercado, incluidos los propietarios, operadores y bancos, están comprometidos con la búsqueda de soluciones que incluyen acuerdos como la reducción o el aplazamiento de fees, pagos de rentas de alquiler aplazadas o condonadas, así como suspensiones de pagos de préstamos y nuevas líneas de crédito.

El enfoque para el sector hotelero pasaría por tanto por encontrar soluciones temporales para afrontar esta crisis, «en lugar de medidas irreversibles drásticas, y esperar una recuperación en la segunda mitad del año». Por ello se considera fundamental el apoyo de los Gobiernos de toda Europa para superar esta crisis.